Blood of the saints – Powerwolf – Reseña de la
preciosa Tany
Tracklist:
1.
|
"Opening: Agnus Dei"
|
0:48
|
2.
|
"Sanctified With Dynamite"
|
4:25
|
3.
|
"We Drink Your Blood"
|
3:42
|
4.
|
"Murder at Midnight"
|
4:47
|
5.
|
"All We Need Is Blood"
|
3:38
|
6.
|
"Dead Boys Don't Cry"
|
3:25
|
7.
|
"Son of a Wolf"
|
3:59
|
8.
|
"Night of the Werewolves"
|
4:30
|
9.
|
"Phantom of the Funeral"
|
3:09
|
10.
|
"Die, Die, Crucified"
|
3:00
|
11.
|
"Ira Sancti (When the Saints Are
Going Wild)"
|
6:25
|
Todo comienza con un redoble de
tambores. Pelos de punta. Profundos coros de fondo. Algunos gritos
escalofriantes. El órgano recrea una atmósfera eclesiástica llena de oscuridad,
y de repente, de una forma sutil, suave
e intensa surge la voz de Attila Dorn, quien con su marcado acento pronuncia el
credo con algunas repeticiones para añadir más dramatismo al entorno. Sin lugar
a dudas la intro de este disco es tenebrosa, y cada vez que Falk Maria Schlegel
pulsa una tecla nos sumergimos más y más ese ambiente de catedral del siglo
XIII en una noche de luna llena. Por momentos se hace más potente y embriagante,
hasta que los instrumentos cesan de sonar y la voz rasgada del cantante rumano
proclama el título del disco: BLOOD OF THE SAINTS.
De
este modo se inicia el intrigante cuarto disco de la banda alemana Powerwolf, el
cual vió la luz en el año 2011. La banda, clasificada como power metal alemán,
nos muestra un disco impregnado del folklore clásico de terror: vampiros,
hombres lobo… Con ese trasfondo de misa católica medieval que podemos observar
en el órgano, los coros (¡que de hecho fueron grabados en una iglesia del siglo
XIII!) las letras escritas en latín e inglés, Pawawalf nos transmite unas
historias muy épicas mezclando conceptos satánicos, religiosos y mitológicos. A
continuación os explico un poco más cómo suenan las canciones por si no le
habéis echado un vistazo todavía.
Sanctified
with dynamite, el primer tema propiamente dicho del disco, es un tema muy
potente en el que todos los instrumentos están perfectamente cronometrados para
hacer saltar mi corazón con el estribillo, que suena bastantes veces a lo largo de la canción
hasta convertirse en himno. Como digo, los coros, la impresionante voz de
Attila, la batería inquebrantable de Roel y las imparables guitarras de los
Greywolf se compenetran mucho y forman unos cambios de ritmo fantásticos. Esta
canción, como el disco entero, está plagada de ‘hallelujas’ heréticos. El
precioso solo acompaña perfectamente esta obra implicando más esos matices power
metaleros de la banda. Y como cierre una
explosión con cristales.
We drink your
blood, uno de sus temas más conocidos, comienza con unas infantiles campanitas
algo malrolleras que dan paso a una explosión de fuertes guitarras acompañadas
del órgano. La letra es hasta humorística si lo ves desde un punto de vista
risueño: ‘’any tipe, any vein’’, ‘’human wine’’, ‘’the sanguine saints’’. A lo
mejor solo me hace gracia a mí. En todo caso, esta canción continúa
repitiéndose hasta que llega a un momento de éxtasis instrumental y coral que
queda interrumpido por las mismas campanitas infantiles del principio. Vuelven
a sonar las vigorosas guitarras y, tras otro estribillo, finaliza de golpe,
pero siempre dejando con un buen sabor de boca.
Murder in the
midnight, una pasada de canción en la que a veces suenan campanas que me hacen
quitarme los cascos para asegurarme de que no suenan fuera, es un tema en el
que observo principalmente la influencia de Iron Maiden, sobre todo en la época
de Di’Anno, cuando se consigue ese sonido armónico que recrea un aura íntima de
misterio al inicio. Las guitarras se aceleran a la par que se narra la
resolución de un asesinato a medianoche. (Y, dios, Attila sigue teniendo esa
preciosa voz potente y rasgada de la que estoy abusando de hablar). Tras
algunos estribillos guiados por la calidad de los Greywolf aparece el solo, el
que desprende muchísima energía y que termina fundiéndose con el aullido de un
lobo. La canción continúa según los parámetros de repetición del resto del disco.
El siguiente
temazo es All we need is blood. Comienza dando gran importancia a los coros
creando una situación en la que el cantante principal exige una respuesta de
otras voces, lo que se conoce como salmo responsorial. Tras este inicio épico
hay un mínimo parón tras el que hacen su aparición todos los instrumentos a la
vez. El estribillo se organiza con notas que se agudizan consecutivamente
siguiendo una escala que finaliza con los rugidos exigentes de sangre. Es una
bonita forma de escuchar cómo eres débil ante este ‘’ejército de Dios’’ que
trabaja a medianoche alimentándose como sanguijuelas. Hay una parte muy bonita
en la canción a partir del minuto 2:15 en el que los coros proclaman
‘’haemophili animus’’ que viene significando algo como ánimo hemofílico, osea,
ganas de sangre. La canción termina con otro de esos estribillos pegadizos.
Dead boys
don´t cry, una canción temáticamente fúnebre y con un estilo despampanante para
los amantes del power comienza de nuevo con coros cantando en latín, lo que da
paso al dinamismo de unas guitarras muy bien estructuradas y llenas de
motivación.
Son of a wolf,
indudablemente mi canción favorita del disco, empieza directamente con esas
guitarras bonitas que se van acelerando y que cuando empieza la batería a tocar
se vuelven hacia unos tonos bastantes rockeros. Attila apuesta por una voz más
rasgada para el inicio. Esta canción tiene a mi parecer uno de los solos más
flipantes de todo el disco, empezando con un éxtasis musical no muy rápido que se va acelerando apasionadamente y nos
termina de motivar justo antes de que Attila pronuncie dos últimos estribillos.
Solo podría catalogar a esta canción de épica.
Night of the
werewolves, que vuelve a recrear una escena de misterio con la guitarra del
inicio, trata la temática de los creados a partir de la semilla del lobo y del humano y de cómo
nunca podrías salir ileso de entre sus garras. El solo mismo parece representar
una persecución en la noche. Es una canción muy briosa y llena de energía sin
lugar a dudas.
Phantom of the
funeral, o cómo sale en spotify: Phanoton of the funeral, comienza con una unión
de las voces e instrumentos bastante
rápida e inspiradora. Lo que más me gustaría resaltar es el sonido que aportan
los Greywolf, cuyo efecto motivador no se reduce únicamente al precioso solazo
de guitarra, si no que se extiende a lo largo de toda la canción.
Die, die,
crucify, es un tema muy cortito que podría resumir perfectamente a Powerwolf: está
marcada por los redobles de tambores, las guitarras infinitamente hermosas, la
aparición del bonito teclado (que aunque no se escuche demasiado en esta
ocasión tiene un papel tonal muy importante), los coros para enfatizar el
ambiente y la poderosa voz cantante. Tiene
ese regusto oscuro que baña todas sus canciones y que hace tan especial
a Powerwolf.
La canción con
la que finaliza el disco, Ira Sancti (When the saints are going wild) es un
tema que me genera mucha intriga porque
no consigo encontrar qué significa la letra escrita en latín más allá de la
expresión lupus anima, ‘el alma del lobo’. Aparte de la letra, musicalmente es
un tema grandioso en el que todos los instrumentos tienen su momento para
sobresalir. Como en el resto del disco, la calidad del sonido es una maravilla
auditiva.
Concluyendo la
review solo me queda una única cosa que decir a los que todavía no lo han
escuchado… ¿a qué estáis esperando?
No hay comentarios:
Publicar un comentario